Foto: I.N., Manhattan, 2010
Narrativa
Paseos por Manhattan
ISABEL NÚÑEZ
Teju Cole
Ciudad
abierta
Traducción de Marcelo Chen
ACANTILADO
296 PÁGINAS
22 EUROS
Teju Cole (Kalamazoo, Michigan, 1971) es escritor, fotógrafo
e historiador del arte norteamericano de origen nigeriano. Ciudad abierta, su primera novela, ha recibido prestigiosos
premios.
Desde el sugestivo arranque, en que el narrador, psiquiatra
nigeriano en Manhattan, escudriña el cielo invernal buscando las formaciones de
ocas salvajes migratorias –que los poetas chinos interpretaban como mensajes
escritos—, el lector se ve atrapado en la historia.
Guelbenzu ha asociado con razón esta novela caminante al flanneur baudelairiano. Yo la entroncaría en la tradición puramente
neoyorquina de Cómo vive la otra mitad
de Jacob Riis, o las Crónicas de Nueva
York de Maeve Brennan, o los ensayos de Henry James sobre las
transformaciones de esa ciudad de ciudades.
En los paseos reflexivos del psiquiatra nigeriano, no sólo
sus pensamientos surgen de lo que recorre su mirada, de las heridas de la
historia, del temblor múltiple de esa humanidad solitaria que forma el
entramado multicultural, sino que su escucha particular le lleva sin
proponérselo a esa “otra mitad”, a tantos refugiados, inmigrantes, reescapados,
readaptados que la componen. Una ciudad que, como mostró Riis, ya en el XIX era
toda migraciones, racismo, guetos, complejo espíritu de acogida.
Sus visitas al viejo profesor japonés de literatura, dr.
Saito, enfermo y filosófico interlocutor, el recuerdo de Nadège, intentando
procesar su ausencia, la rotura con su madre, la abuela germánica perdida, las
voces de sus pacientes o de tantas figuras fugaces (en una estafeta de correos,
un cibercafé…) que le llaman “hermano” contándole relatos donde laten el dolor
histórico y el conflicto. Un dolor que le alcanza en dos momentos culminantes
del libro, sin impedir su discurrir meditativo, la imbricación de su
pensamiento en la mirada a la ciudad.
El valor de Teju Cole es haber articulado esa historia de la
ciudad en una novela andante, urbana y contemporánea, donde mezcla con osada frescura
ensayismo y opinión política (en algún caso chirría), música, arte,
pensamiento, literatura. Un homenaje a Manhattan y un sutil equilibrio
narrativo para un escritor nuevo. Si la literatura está hecha de preguntas y de
ecos que nos resuenan y transportan, esto es pura celebración, feliz y
dolorosamente melancólica, de la literatura.